Con la escalada al Chullo con sus 2.610m arás la cumbre mas alta de la provincia de Almería, además bordearás la «frontera» con Granada.
- Desnivel de subida 600 m
- Distancia recorrida 8 km.
Ideal para la práctica con raquetas de nieve
Aunque es una cumbre “menor” de fácil subida y poco interés montañero -no hay más que seguir una loma de escasa pendiente-, la elegimos para empezar a practicar en el uso de las raquetas de nieve, que nunca antes habíamos probado, para de esta forma, estar preparados para mayores empresas.
En este caso las raquetas, unas flamantes TSL las alquilamos en, un conocido establecimiento de montaña de la vecina localidad de Villena (Alicante). No obstante por si tienes interés en la compra aquí están a buen precio.
Estas TLS se adaptan tanto a los terrenos más facilones como a los más agrestes
Llegada al Puerto de la Ragua
Llegamos al puerto de la Ragua a eso de las 8,30h, que nos recibió con una temperatura de 8º bajo cero. Ajustamos las fijaciones de las raquetas a la longitud de la bota para lo que no hizo falta ninguna herramienta especial y con el único inconveniente del contraste de temperaturas al salir del coche.
Desde el mismo punto varios montañeros se disponía también a realizar una magnífica ruta en esquís de travesía, de la Ragua hasta Trévelez.
La subida la hicimos por el cortafuegos que sale de la parte posterior del albergue y estación recreativa “puerto de la Ragua”, superada la primera loma alcanzamos el sol, y ya nos sobraba toda la ropa.
En toda la zona había caído un “paquetón” de nieve impresionante, que no había transformado nada, estaba completamente polvo, así que las raquetas o esquís resultaban imprescindibles, como pudimos comprobar en un intento de caminar sin ellas.
Cumbre y descenso
A la cumbre llegamos dos horas y media después, pudimos disfrutar de unas magníficas vistas, pues el aire de poniente había limpiado la atmósfera. El descenso lo hicimos por el mismo itinerario de subida, con la intención de llegar pronto al puerto y bajar antes de que se congestionase la carretera, objetivo que no conseguimos.
Hay poca organización en la Ragua, la gente aparca en la carretera, y como no hay arcén sólo puede circular un coche, con lo que no se pueden cruzar los que suben con los que bajan, organizando un atasco desesperante.
Unos esforzados voluntarios de Cruz Roja hacían lo que podían para controlar el embrollo, finalmente conseguimos salir de allí y ya nos paramos hasta Chirivel, donde nos dimos el merecido homenaje de la semana.